viernes, 18 de noviembre de 2011

Reflexiones antes de votar

VALENCIA, 18 de noviembre de 2011.- Tras haber analizado detalladamente los programas electorales con que diversas formaciones políticas concurren a las Elecciones Generales del próximo domingo, la Federación Educación y Desarrollo en Libertad (FEDEL), Valencia Educa en Libertad (VAEL), Alicante Educa en Libertad (AEL), Castellón Educa en Libertad (CEL), la Asociación Católica de Maestros de Valencia, la Asociación de Educadores Cristianos de Alicante (AECA), APPRECE C. Valenciana y la Asociación Juan Pablo II por el Desarrollo Humano de Alzira proponemos una serie de reflexiones en torno a ámbitos en los que los valores adquieren especial relevancia: la concepción del hombre, la educación de los hijos, la familia y el respeto a la vida. 
  
En lo referente a la concepción del hombre, sostenemos que toda acción política se ha de basar en la dignidad intrínseca de todo ser humano y ha de responder a la realidad de su naturaleza. Por tanto, cualquier actuación que atente contra la dignidad del hombre, le impida su realización como ser libre o le aleje de su ser natural es un atentado contra la libertad, mucho más si se impone desde los poderes públicos. En este campo, nos parecen inaceptables las propuestas que apuestan por la preponderancia del Estado y por la búsqueda del uniformismo. Otro tanto cabe decir de aquellas en las que la concepción del hombre coincide absolutamente con el marxismo y con la ideología de género. 
  
En cuanto a la educación, consideramos que es esencial reconocer, promover y garantizar la libertad de los padres para educar a los hijos en sus propias convicciones ideológicas, pedagógicas, éticas y religiosas, según reconocen la Constitución y los tratados sobre esta materia ratificados por España. Ello implica la libertad de elección de centro y la libre creación de los mismos, con una oferta formativa de iniciativa social que responda a las demandas plurales de las familias. También reconocemos a nuestro sistema educativo como heredero del derecho romano, la filosofía griega y la cultura cristiana, fuentes de nuestra civilización común. En este capítulo, se hace necesario tanto reforzar la autoridad del profesor como la búsqueda de la excelencia. Rechazables son, a nuestro juicio, políticas educativas que se fundamentan en la intervención omnipresente del Estado y en la preponderancia absoluta de las instituciones de enseñanza pública en detrimento de las de iniciativa social, a las que algunas candidaturas proponen privar de la posibilidad de acceder a financiación pública. 
  
La familia basada en el matrimonio entre el hombre y la mujer es la institución básica de la sociedad y del desarrollo de la humanidad. Es en su seno donde se produce la vertebración de la sociedad, la principal escuela de ciudadanía, de cohesión, de solidaridad y de progreso. Por ello, valoramos muy positivamente las propuestas que plantean la elaboración de un plan integral de apoyo a las familias, con financiación de las administraciones públicas. 
  
Por último y puesto que estamos comprometidos con la defensa del derecho a la vida, desde la concepción hasta la muerte no provocada, rechazamos todo intento de perpetuar el aborto como supuesto derecho, así como los intentos de legalizar las prácticas eutanásicas y eugenésicas. Por el contrario, valoramos el compromiso de promover una ley de protección de la maternidad con medidas de apoyo a las mujeres embarazadas, especialmente a las que se encuentran en situaciones de dificultad.
  
Fuente: FEDEL.

2 comentarios:

  1. El último párrafo no me ha quedado muy claro:
    "rechazamos todo intento de perpetuar el aborto como un supuesto derecho"; bien, es un buen comienzo. Pero ,como no decís nada mas, ¿se ha de entender que aceptáis la ley de despenalización del aborto?
    Por que en esta sociedad relativista, pueden convivir de manera esquizofrénica una ley de protección de la maternidad junto con una ley del aborto, y así parece que contentamos a todos, pero no.

    Saludos.

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  2. No ha de entenderse tal cosa, sino la contraria. Ya decimos que defendemos el "derecho a la vida, desde la concepción hasta la muerte no provocada".

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