jueves, 5 de julio de 2012

Wert: "Un sistema que renuncia a la cultura de la evaluación, renuncia a la exigencia"

Con "resultados mediocres".
  
MADRID, 5 Jul. (EUROPA PRESS) - El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, ha advertido de que "un sistema que renuncia a la cultura de la evaluación, está renunciando a la cultura de la exigencia", y ha añadido que, entonces, ese sistema "no puede sino producir resultados mediocres".
   
Wert defendía así, en declaraciones a la Cadena Cope que recoge Europa Press, la inclusión en la futura reforma educativa de evaluaciones en las distintas fases del ciclo educativo, al tiempo que ha criticado utilizar el término 'reválida', que considera un "truco facilón para descalificar, como mirando al pasado, una cosa que realmente mira al futuro".
   
"Los países que participan en la prueba de Pisa, los países de la OCDE, todos los que tienen un resultado satisfactorio, tienen un sistema de evaluaciones externas, nacionales y censales en las distintas fases del ciclo educativo", ha recalcado.
   
En referencia a los recortes en educación ha destacado que las comunidades autónomas disponen de herramientas para gastar en Educación "con más eficiencia", una cantidad en torno a los 3.000 millones, algo más del 5 por ciento de la inversión educativa total. "Si la eficiencia cien no existe, siempre hay un procedimiento en el que, sin perjudicar la calidad, se puede mejorar algo más la eficiencia", ha apuntado.
   
En esta misma línea, ha destacado que para limitar el gasto público en educación habría que pedir un esfuerzo mayor a otros agentes del sistema, concretamente a las familias. "No estamos en un horizonte de pedir eso sino de abrir una reflexión acerca de cuál  es la dimensión y la embergadura de el estado de bienestar y cómo repartimos aquello que hasta ahora el estado de bienestar contemplaba y no va a poder contemplar sosteniblemente en el curso de los próximos años", ha añadido.
   
"Si solo hablamos de recursos y no de resultados estamos desconociendo los problemas principales: la elevada tasa de fracaso escolar, que se traduce en un déficit de empleabilidad de los jóvenes (53% de desempleo en menores de 25 años) y los malos resultados en la comoparativa internacional con un 3 por ciento de alumnos excelentes en Pisa frente a la media de los países de la OCD, un 8 por ciento" ha añadido.
   
Por otra parte, ha incidido en la sociedad del conocimiento, donde la materia prima de la que dispone un país es la cantidad de talento formado, lo que a su vez determina su posiblidad de instalarse en un escalón más alto o más bajo de la cadena de valor en el reparto mundial de papeles económicos.
   
En este sentido ha asegurado que una reforma educativa centrada en los resultados, en la excelencia y la empleabilidad es la reforma más importante que tiene que acometer este país. 
  
INMERSIÓN LINGÜÍSTICA
    
Por otro lado, en relación a la sentencia del Supremo que establece que los niños de 3 a 6 años tienen derecho a recibir la enseñanza en catalán pero también en castellano, Wert ha señalado que el Estado no tiene una administración educativa en Cataluña ni en ningún otro sitio, excepto Ceuta y Melilla y que, por tanto, no puede ejercer supletoriamente esa labor.
   
Sin embargo, ha destacado que la Generalitat, al estar  sujeta a la ley, debe cumplir lo establecido por el tribunal. "Si le dice que esas medidas no valen para dar cumplimiento tendrá que arbritar otro procedimiento para darle cumpliento", ha añadido.
   
Finalmente, ha subrayado que de los resultados del programa 'escuela 2.0',  que se ha desarrollado en los últimos tres años, se ha podido observar una diferencia entre el buen rendimiento que han dado las pizarras, frente el rendimiento "mucho más cuestionable, mediocre" que han dado las tabletas de los ordenadores portátiles para los alumnos. "Las tecnologías son instrumentales, el niño no aprende por tener un ordenador", ha puntualizado.
  
Funte: Europa Press.

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