Pervertir la educación

Línea editorial COPE (17-05-11).

  

La Junta de Andalucía, que tanto trabajo tendría para afrontar los  escándalos de corrupción de los “Eres” irregulares y el nepotismo, lanza ahora un nuevo proyecto de ingeniería social con su campaña de lo que llama falazmente “educación sexual”, inserta en Educación para la Ciudadanía y la ley del aborto. Se trata de elaborar un nuevo manual que supere el que ya se aplica por su vecina ideológica Junta de Extremadura, dedicado a la masturbación femenina y que incluye la compra de revistas pornográficas para distribuirlas en los colegios entre los alumnos a partir de los trece años. Para perfeccionar el aprendizaje, siempre que los padres no se apongan, se proyecta una especie de “gira turística” por los urinarios de los bares para que los niños copien los mensajes sexuales allí dejados, para después debatirlos en clase. 

  

Naturalmente se aconseja el uso de preservativos y contraceptivos para no caer en el peligro de embarazos no deseados. La llamada educación sexual queda reducida a excitar el erotismo y evitar sus consecuencias. La Junta de Andalucía pretende convertirse en educadora, pero además pervierte lo que es la auténtica educación: descubrir la verdad del ser humano, el significado de todas las dimensiones de su vida. Por el contrario aquí se trata de enseñar a los adolescentes a busca el placer desconectado de su sentido y de la integridad de lo humano, evitando además cualquier responsabilidad. Lo que se oculta es la amargura, el vacío y la violencia a la que aboca una sexualidad sin significado. Una irresponsabilidad en toda regla, de la que los ciudadanos andaluces sabrán pedir cuentas próximamente. 

  

Fuente: COPE.