Alicante, 28 nov (EFE).- El conseller de Educación y Empleo, José
Ciscar, ha calculado que entre diciembre y enero se saldará la deuda que
mantiene la Generalitat Valenciana con los libreros en concepto de las
subvenciones de libros de texto, conocidas como "bonolibro".
"La
Generalitat tiene problemas de liquidez que hacen retrasar los pagos,
pero los libreros van a percibir todas las cantidades adeudadas lo antes
posible porque la voluntad de pago es total tanto con ellos como con el
resto de proveedores", ha subrayado.
Estas palabras del conseller
a preguntas de los periodistas se han producido en una rueda de prensa
sobre los presupuestos autonómicos de 2012 en la sede del PP de
Alicante, junto a varios responsables del partido, como Rafael Maluenda,
David Serra y el nuevo presidente de los populares de la provincia,
Miguel Ortiz.
Preguntado por la fecha aproximada del pago a las
librerías, el conseller ha reiterado que entre diciembre y enero "se
saldará perfectamente la deuda" y, en todo caso, "con brevedad".
Como
ya anunciara hace unas semanas, Ciscar también ha puesto de manifiesto
que su departamento cambiará para el curso 2012-13 los baremos de las
ayudas sociales para el citado bonolibro, así como para el bonoinfantil,
el comedor escolar y el transporte.
De esta manera, el bonolibro,
que otorga 105 euros lineales, dejará de ser "universal" y pasará a
darse en una cuantía mayor o menor que los citados 105 euros en función
de la renta familiar.
El objetivo es, en palabras del conseller,
ajustarse a un momento "en que las familias lo pasan peor para ser
capaces, más que nunca, de mantener la igualdad de condiciones en
Educación".
Acerca de los nuevos criterios, ha apuntado que
todavía no están cerrados pero se ha comprometido a que para el próximo
septiembre las familias sepan cuándo les corresponderá por cada ayuda.
Ha
destacado que este cambio en la distribución no afecta a la cuantía
total, ya que pese a que el presupuesto autonómico general cae el 6,4
por ciento las ayudas se mantienen invariables en 228 millones de euros
(entre 80 y 90 para la provincia de Alicante en función de los
beneficiarios) porque el Consell defiende que "no se puede rebajar en ni
un solo euro en políticas sociales".
El presupuesto de su Conselleria para el próximo año se eleva a 4.577 millones de euros, el 30,7 por ciento del total.
En
cuanto al personal, se van a mantener todas las estructuras y que el
número de profesores se mantendrá igual con respecto a 2011, donde a su
vez la cifra ha aumentado entre 70 y 75 docentes sobre 2010 dentro de
una plantilla de más de 51.000 personas.
La Conselleria cierra en
estas fechas la planificación para 2012 de inversiones en centros
públicos, tanto para construcción, ampliación, reparación y
conservación, con el objetivo de cumplir el compromiso del president,
Alberto Fabra, de eliminar todas las aulas prefabricadas.
En
materia de Formación y Empleo, ha dicho que el próximo año se dirigirán
más de 164 millones de euros (entre 57 y 65 para Alicante) para ocupar a
más de 164.000 personas (entre 45.000 y 55.000 en la provincia
alicantina).
Ha puesto de manifiesto que las peticiones de
escolarización en Formación Profesional (FP), donde hay 1.180 ciclos
formativos, siguen creciendo hasta el punto de que ya supera a la
demanda de bachillerato, "algo impensable unos años atrás".
A este
respecto y aprovechando su presencia en Alicante, ha explicado que
negocia con las patronales COEPA y FEMPA para que sus centros de
formación sean también de FP a partir del próximo curso, mediante un
concierto educativo.
Sobre la implantación del trilingüismo, el
conseller ha indicado que las negociaciones van "muy bien" porque entre
todas las partes existe la coincidencia básica de que hay que cambiar el
modelo para una educación en tres lenguas.
Ha recordado que la
idea del Consell es que el inglés (sin descartar el alemán, francés e
italiano en alguna línea) se generalice desde los 3 años en,
aproximadamente, un tercio del tiempo junto con el valenciano y
castellano, aunque los porcentajes aún no han sido concretados.
En
todo caso, confía en que la "flexibilidad" de los interlocutores
facilite llegar a un acuerdo, siempre tomando como punto de partida
criterios pedagógicos. EFE
Fuente: ABC.
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