El índice de absentimo en la docencia septuplica el umbral considerado «excesivo» por las mutuas. Las bajas cuestan al Consell 63 millones al año.
ROBER SOLSONA |
R. B. CRESPO / VALENCIA
Día 06/02/2012
Los
funcionarios docentes, uno de los colectivos afectados por el decreto
de recortes de la Generalitat –y uno de los que más beligerantes se ha
mostrado con las medidas adoptadas por el Consell–, es también el que
presenta un índice de absentismo por baja laboral más elevado de la
administración valenciana.
Según
los datos de la Conselleria, el 27,68 por ciento del personal docente
está de baja –solo se consideran aquellas que se prolongan más de un
día–, de media, cada mes. Un porcentaje muy superior al de cualquier
otra área de la Administración valenciana, y más de veinte puntos por
encima de lo que las mutuas consideran asumible en el ámbito laboral
privado.
Según
las tablas de las mutuas y compañías aseguradoras, el límite del 4% de
absentismo laboral en las empresas se considera ya «excesivo». En el
caso de la educación pública valenciana, el índice de absentismo no solo
supera ese umbral sino que lo multiplica por siete. El dato se refiere a
2011; en 2010 fue aún unas décimas superior. El absentismo alcanzó
entonces una media del 27,94 por ciento.
El índice de
incidencia de las bajas, con todo, es superior al que reflejan los datos
de la Conselleria. Las 276,8 bajas por cada 1.000 docentes se refieren
al total de la plantilla dada de alta en Educación, que integra tanto a
aquellos profesores con plaza propia como a los interinos –que se
encargan, precisamente, de cubrir las bajas o las vacantes–, y que está
compuesta por 57.198 trabajadores. No obstante, el número real de plazas
en los centros educativos de la Comunidad es de 52.000. De esta forma,
el porcentaje de bajas sería aún superior al contemplado.
Según
explicaron fuentes de la Conselleria, este departamento cuenta con un
presupuesto específico para cubrir las bajas y contingencias similares.
Un presupuesto que alcanza los 73 millones de euros anuales para pagar
el absentismo derivado de las bajas, los permisos de maternidad u otro
tipo de licencias. Según los cálculos de la Conselleria, el coste de las
bajas en sentido estricto supone unos 63 millones de euros.
Más docentes que grupos
El elevado índice de
absentismo en Educación resulta aún más llamativo si se tiene en cuenta
que la plantilla de cada centro cuenta con un número de docentes
asignados superior al de la cantidad de grupos de alumnos diferentes. Es
decir, el propio sistema establece que haya más profesores que clases
para evitar que ningún grupo se quede sin profesor ante una posible
baja. Pese a todo, la Conselleria se ve obligada a cubrir centenares de
bajas cada mes con interinos.
Según
las tablas de datos que maneja Educación, es frecuente que un interino
tenga que cubrir la baja de otro docente que, a su vez, se había
incorporado a la plaza para cubrir una primera baja. Entre las causas
más frecuentes del absentismo están los problemas respiratorios (el 23,6
por ciento del total, con 3.744 casos en 2011), las dolencias
osteomusculares-conectivas (que suponen el 19%, con 3.006 casos el
pasado año) o los accidentes y traumatismos (que llegan al 8,4% del
total con 1.333 casos en 2011). Además, entre enero y noviembre del
pasado año se quedaron «pendientes de diagnóstico» un total de 1.731
bajas, lo que supone más de un 10 por ciento.
Fuente: ABC.
mentira absoluta
ResponderEliminar¡Cualquiera sabe qué mecanismos de cálculo han utilizado para dar esa exageradísima cifra! Como hemos publicado hoy en este mismo blog, Blasco (portavoz del PP en las Cortes) ha intentado dar alguna peregrina explicación al respecto. Véase la entrada "C. Valenciana. Blasco afirma que hay que introducir "racionalidad" en el sistema educativo", cuya url es http://vael-valenciaeducaenlibertad.blogspot.com/2012/02/c-valenciana-blasco-afirma-que-hay-que.html
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