Gabilondo se compromete a acabar con la educación diferenciada

Asegura que el Gobierno trabajará en este sentido, cercenando la libre elección de los padres.

 

REDACCIÓN HO.- El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, ha defendido un modelo 'inclusivo' y de 'coeducación' en las escuelas y ha señalado que el Gobierno trabajará "para que no se separe" a los niños por sexos en los colegios, según informa Europa Press.

 

Noticias HO daba a conocer a primera hora de esta tarde la nota de prensa emitida por ChequeEscolar donde se daba cuenta del “repentino cambio de juicio del Gobierno al admitir, ahora, que la educación diferenciada no es discriminatoria” y ha pedido a la ministra Leire Pajín que “sea consecuente con este cambio y retire el proyecto de Ley de Igualdad de Trato, que sí discrimina a los padres que queremos elegir la educación diferenciada para nuestros hijos”.

 

El Ejecutivo tratará de erradicar la enseñanza diferenciada

 

Según el ministro Gabilondo, "separar no es adecuado ni es bueno educativamente. Nosotros trabajaremos para que no se separe", ha asegurado en una entrevista al canal 24h de TVE, en la que se ha mostrado contrario a esta práctica pedagógica y seguida durante años por todo tipo de centros educativos privados, públicos, concertados, nacionales e internacionales.

 

Con estas palabras, el ministro confirma lo que ChequeEscolar.org pone de manifiesto en su nota de hoy: que la única razón por la que el Ejecutivo se ha propuesto dejar sin financiación pública a los centros de enseñanza diferenciada es su interés, puramente sectario, en "promocionar otro modelo pedagógico, el de la coeducación", la enseñanza mixta.

 

Reconoce así mismo que, además de no financiarla, el Gobierno intentará impedir la aplicación de esa opción pedagógica, lo que contravendría lo dispuesto en varios tratados internacionales sobre Educación, que establecen la plena legitimidad de la escolarización por sexos.

 

Palabras etéreas de sabor demagógico

 

Gabilondo ha tratado de revestir sus afirmaciones con alguna concesión a la demagogia, al asegurar que "el mejor modelo para la escuela" es aquel en el que se aprende a "convivir en la diferencia y en el respeto a los derechos de esa diferencia". Por último, ha rehuido hablar sobre los beneficios en los resultados que puede suponer separar a los alumnos por sexos, afirmando que ese es un debate "extraordinariamente técnico", pero ha subrayado que la "apuesta" del Ejecutivo es no hacerlo. 

  

Fuente: HazteOir.org.