371 objetores, entre ellos algunos navarros, han demandado al estado español ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Denuncian “la vulneración de derechos fundamentales en materia de objeción”, en relación a la polémica imposición de la asignatura de Educación para la Ciudadanía.
Ni Constitución, ni Derechos Humanos. Como se deduce evidentemente de la consulta de cualquier manual de estudio, y como ha considerado algún tribunal respecto a los contenidos, la EPC no es más que un burdo intento de adoctrinamiento para que los jóvenes reciban un concreto enfoque ideológico sobre las causas de los conflictos y las desigualdades en el mundo, la sexualidad, la religión, la economía… Podríamos decir que en ocasiones la EPC incluso choca contra los puntos de vista de los padres, pero es que se trata de una asignatura que imparte ese determinado enfoque no a pesar de que choque con la educación que la mitad de los jóvenes españoles reciben de sus padres, sino precisamente para que choque con ella y la destruya, si puede.
La demanda alega la violación por parte del estado español de varios artículos del Convenio Europeo de Derechos Humanos, como el derecho a la vida privada de los menores, la libertad de pensamiento, conciencia y religión, o el derecho de los padres a la educación de sus hijos conforme a sus convicciones, y ha sido presentada por Profesionales por la Etica junto a la entidad especialista en la defensa de los derechos humanos Alliance Defense Fund (ADF), contando además con la asistencia técnica del Centro Europeo para la Ley y la Justicia (ECLJ).
El presidente de Profesionales por la Ética estima que la sentencia podría conocerse a lo largo del presente año.
Fuente: Navarra Confidencial.
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