domingo, 6 de febrero de 2011

Y mientras tanto llega usted al gobierno, ¿qué hago sr. Rajoy?

Por Margarita Cabrer.

 
Este es el aspecto que presentan algunas aulas del colegio Luis de Morales durante la clase de EpC, en ellas podríamos estar sin pasar tanto frío como en el patio. La biblioteca está vacía, y la sala de ordenadores también... desconozco si hay alguna más.

Se me dijo que el niño no podía estar  en la biblioteca porque "era una joya que había costado mucho dinero" y que "no estaba para eso"; pero esta semana pasada nos han hecho llegar a los padres un primer boletín de la biblioteca en el que se nos anima a usarla; eso sí en horario de tardes.
 
Entonces ¿pueden los padres entrar en la biblioteca o no? ¿Es esto un absurdo del mismo calibre que la argumentación de la señora consejera para explicar por qué no participamos en el informe PISA? ¿Es solo una provocación?

Se me dijo que "objetar no existía", pero yo sigo estando en el patio del recreo, haga frío o calor.

No me han contestado desde la dirección del colegio al escrito que les remití con fecha 10-1-2011, con entrada nº 63, en el que hago cinco preguntas a mi juicio importantes. Cuánto tarden en contestar no lo sé.

Y mientras tanto llega usted al gobierno, ¿qué hago sr. Rajoy?

El señor Rajoy ha dicho ya claramente que quitará EpC, por adoctrinadora; pero hasta que esto suceda, ¿tengo que permitir que a mis hijos se les examine y se les califique sobre sus gustos, creencias, opciones personales...?

Cuánto nos dolieron los últimos fusilamientos del régimen de Franco, pero la insensibilidad que muestran algunas personas ante este atropello concreto que estamos padeciendo los objetores nos duele en extremo; máxime cuando al hablar con ellos te dicen que comparten tus valores, que te comprenden...

Pedimos que haya paz en el otro lado del mundo, que se respeten los derechos en la Conchinchina... pero en Badajoz, en el colegio público Luis de Morales, se nos está dificultando a los padres lo más posible el ejercicio de nuestros derechos constitucionales mientras las personas que podrían hablar claro miran para otro lado y cuentas los días: 108, 107...  en una cuenta atrás hacia el día "D" que los ciudadanos podríamos llamar día "B" de bledo porque nos importa un ídem.

Los políticos de la oposición se preguntan dónde está el pueblo que no protesta ante tanto desmán del Gobierno.
 
Pero los ciudadanos sí estamos reaccionando; aunque no al gusto de la clase política. Los niños se pelean y corren, cada uno con su versión, a contar a los padres lo que el otro ha hecho para que los papás le castiguen. Así nos quieren usar los políticos.
 
El problema en el fondo es que alguien todavía no ha caído en la cuenta de que los padres somos los principales educadores de nuestros hijos y el Estado sólo actúa garantizando y facilitando esa potestad de los padres. Y eso, ya gobierne uno o gobierne otro, tiene que quedarles muy clarito; al colegio, al gobierno y a todo el que se acerque a mis hijos.

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